La maestra Teófila Yaname Felices, originaria de Sarhua, aprendió de sus tíos el arte del telar de cintura o kallwa, con el cual elabora mantas y tejidos de gran formato. Sus diseños representan la riqueza de la naturaleza y la vida comunitaria, con motivos que incluyen aves, conejos, pumas, ranas, zorros, perdices, astros y corazones, además de letras y números que personalizan cada pieza.
Su obra más representativa es la pausa lliclla, manta de uso cotidiano para las mujeres de Sarhua, que simboliza identidad y pertenencia cultural. También destacan la simpa watakuq, faja destinada a sujetar trenzas, y las chillpitas, fajas bordadas utilizadas en la vestimenta diaria. Estas últimas incorporan decoraciones llamadas paychas y ampulus, cuyo tamaño varía según la cantidad de faldas que deben sostener.
Otro elemento significativo de su producción es la chamana wayta, adorno para sombreros que originalmente se elaboraba con flores naturales. Con el tiempo, estas fueron sustituidas por pompones hechos a mano, que mantienen viva una costumbre festiva. El trabajo de Teófila une tradición y creatividad, convirtiéndose en un puente entre la memoria colectiva y la práctica textil contemporánea.
